Giuseppe Arcimboldo: Arte gastronómico.
Giuseppe Arcimboldo, pintor italiano que nació en 1526 (¡Puff,
hace un montón!) hacía arte sin cocinar; pero Arte de verdad.
Arcimboldo no fue un pintor cualquiera, ya que se puede decir,
revolucionó el concepto de retrato creando fantásticas
composiciones de rostros de personas a partir de alimentos.
¡Quéeeeeee!
OBSERVEN, ¡LAS PRUEBAS ESTÁN A LA VISTA!
Sus más originales obras son retratos compuestos
con flores, frutas, verduras, peces, aves,
animales u objetos varios.
El exquisito menú de Giuseppe Arcimboldo.
De la serie de “Las cuatro estaciones”, el cuadro “El otoño” es el
máximo exponente de la pintura gastronómica.
En él mezcla racimos de uvas, peras, hojas de parra, calabazas,
castañas, setas, etc.; que conforman un retrato de perfil de un
hombre.
WOW!!!! Quien lo contempla de lejos, sobre todo si lo hace por
primera vez, tiene que frotarse los ojos acercarse y ver cómo el
rostro humano desaparece y pueden observarse, a la perfección, un
motón de frutas.
(OTOÑO)
“La primavera” se encuentra en el museo de Bellas Artes de San Fernando (en Madrid, junto a la puerta del Sol).
Lo que nos parece algo extraordinario son sus retratos invertidos. Están compuestos para ser observados al derecho y al revés y debían tener sentido en las dos posiciones.
¡Observen qué fantástico es su arte!
Una fuente de verduras se transforma, al mirarlo al revés, en un “hombre
de mofletes gordos y labios gruesos”.
En todo ARTE, no hay nada que haga más importante a su creador, al
punto de transformarlo en un “GENIO”, que ser el primero en hacer algo
INNOVADOR y no cabe dudas que GIUSEPPE ARCIMBOLDO ES UN
EXTRAORDINARIO ARTISTA por ello. Nadie había hecho algo como él.
Aunque, se nos está ocurriendo que en cuestión de ARTE: no está todo
dicho. Aún nos falta ver sus creaciones…
Por eso, los/las invitamos a hacer sus propios retratos utilizando, como ARCIMBOLDO, elementos que encontramos en nuestras cocinas
Pueden cortar figuras en revistas de frutas, verduras, aves, peces o lo que sea que tenga relación con el arte culinario (ya aprendimos que es el arte de cocinar), o incluso dibujarlos ustedes mismos y hacer los retratos más maravillosos que se hayan visto jamás.
¡ A CREAR, ARTISTAS!